Hay noches en las que el sueño no quiere apoderarse de mi cuerpo y en las que puedo llegar a pensar muchísimas cosas, y realmente creo que puedo solucionar mi pequeño mundo interior solo imaginando las soluciones, auto convenciéndome de ellas . . .
Pero hay otras noches en las que esas soluciones encontradas, esos pensamientos que creía tan claros dejan paso a los sentimientos puros, esos sentimientos que surgen sin pararte a pensar en ellos, es algo así como cuando sientes mariposas por la tripa.
Y con esto llego a la conclusión de que lo que dicen las tripas
SIEMPRE ES LO CORRECTO, aunque a la vez, también pueden desestabilizarte por completo, tirando abajo todo lo que en las noches sin sueño soluciono.